000 | 01837nam a22002537a 4500 | ||
---|---|---|---|
003 | BO-LpFFM | ||
005 | 20240507232320.0 | ||
008 | 190122s bo |||| |||| 00| 0 spa d | ||
040 |
_aBO-LpFFM _bspa _cBO-LpFFM _dBO-LpFFM _erda |
||
041 |
_aspa _bspa |
||
044 | _abo | ||
082 |
_aFO741.6 _bR31p |
||
100 | 0 | _aMarco Toxico | |
245 | 0 | 0 |
_aMusicaníbal / _cMarco Tóxico |
250 | _a1 ed. | ||
260 |
_aLa Paz, Bolivia : _bEl cuervo, _bLápiz : _c2012. |
||
300 |
_a25 p. : _bil. ; _c17 cm. |
||
500 | _aEn este texto también esta "Por la noche el viajero se apresura" de la autora Daniela Rico | ||
505 | _aMusicaníbal, dice su autor, “es la memoria de un hombre que se alimenta con sonidos. En realidad, es la memoria dibujada de tantas tardes y noches escuchando una y otra vez, repitiendo como un mantra, las canciones de los pobres compositores, convertidos en víctimas de mi inútil voz que trataba de imitarlos para sentirme menos solo (y más interesante, tal vez)”. Pedro Guerra, Arturo Meza, Leonard Cohen y Joaquín Sabina, entre otros cantantes, inspiran las líneas de estos autorretratos. Por su lado, los grabados de Daniela Rico transcurren por la página, como titula uno de ellos, “como una sombra que huye”. Sobre un fondo negro, pasan cuerpos que son mapas, mapas que son cielos, cielos que son pájaros, pájaros que son cuerpos. El viajero al que alude el título de la serie —hay en él un eco de Calvino (que no calvinista) que no se debe ignorar— camina por una senda sabiendo —como se lee en otro de los grabados— que “no se llega mediante un salto y tampoco sin perderse”. Hay que saber perderse, entonces, que como se sabe no es nada fácil, exige mucha disciplina. | ||
650 | 1 | 4 | _aDiseño grafico |
650 | 1 | 4 | _aIlustraciones |
942 |
_cLIB _2ddc _n0 |
||
999 |
_c4062 _d4062 |